
Elegantes vestidos en las mujeres, refinados trajes de chaquetas en los hombres, lindos atuendos los que iluminaban a los niños y niñas de Primera Comunión, entre distinguidas pamelas que lucían las niñas más pequeñas del lugar.
Elegantes se han vestido las calles de un pueblo donde ha desparecido el blanco inconfundible del pueblo andaluz para transformarse en un efímero bosque. Un escenario que embauca a todo aquel que tiene la oportunidad de pisar las alfombras de romero, pasear por inmensos pasillos de eucaliptos y sentir el olor de múltiples flores silvestres que custodian los portales de las viviendas.
Así se viste el pueblo de Hinojos para recibir a la Custodia. Una tradición centenaria que ya está en manos de investigadores para dar el primer el paso y solicitar su reconocimiento como fiesta de interés cultural.
El Corpus de Hinojos está viviendo uno de los mejores momentos de su historia y así se demostró en la jornada de ayer. El domingo comenzó con la Santa Misa, y fue cantada por la Coral Sta. María del Valle de Hinojos. Tras la ceremonia, la procesión inició a las 11:15h y no regresó a la Parroquia hasta 13:15h, tres cuartos de horas más tarde de lo habitual debido a la afluencia de público y por la recreación del paso, en todo momento portado a hombros por hermanos y jóvenes de la Hermandad Sacramental y acompañada por la Sociedad Filarmónica de Pilas.
Durante el recorrido la Custodia se ha detenido en los altares que ha realizado las hermandades locales, Hermandad de Vera Cruz, Hermandad del Valle, Hermandad de la Soledad y Hermandad del Rocío donde se han cantado distintos temas litúrgicos.
Una de la más paradas más señaladas ha sido en la Plaza Príncipe de Asturias, en la que se encontraba la alfombra de serrín teñido realizada por los alumnos del Taller Municipal de Artes Plásticas y Visuales. Una obra de 25 metros cuadrados que este año ha contemplado un paisaje propio del municipio, un atardecer de la marisma hinojera donde se ha señalado el eucalipto de Vetalarena, en el que anida una pareja de Águila Imperial.
Entre las novedades de esta edición, el Corpus de Hinojos ha ampliado su recorrido hasta la calle Aguirre, de manera que se ha incorporado uno de los rincones más bellos del municipio hinojero “El Cerrillo”, un pequeño barrio que retrata la imagen de una típica plaza sevillana, puesto que no podemos olvidar que hasta el S.XVIII Hinojos pertenecía a la capital hispalense.
El Corpus de Hinojos va cobrando notoriedad cada año, y como prueba de ello la presencia del Presidente de la Diputación de Huelva, quien ha confesado que es una de las fiestas más singulares de la provincia y todo onubense debe conocer.